Placer en capas: el pastel de galleta y frambuesa deleita tus sentidos

No. El pastel de frutas no tiene por qué ser siempre igual. Esta vez no vamos a usar gelatina para fijar las frutas en almíbar sobre una base de pan dulce, sino que vamos a hacer una versión más fresca. Además de su sabor, tiene mucho que ofrecer visualmente. 

Vas a necesitar:

Para la base:

  • 2 huevos
  • 100 g de azúcar
  • 120 g de harina
  • 10 g de maicena
  • 1 cucharadita de polvo de hornear

Para el "pudding" de frambuesas:

  • 185 ml de jarabe de frambuesas
  • 375 ml de agua
  • 55 g de polvo para "pudding"
  • 375 g de frambuesas congeladas

Para la crema:

  • 400 g de crema (nata) montada

Para la decoración:

  • 12 galletas de mantequilla
  • 12 frambuesas

Para aderezar (opcional):

  • Azúcar en polvo

Se hace así:

  1. Para preparar la base del pastel, tienes que batir los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté espumosa. Después agregamos la harina, la maicena y el polvo de hornear. Cubrimos el interior de un molde con papel para hornear y vertemos la mezcla. Lo metemos al horno a 200 ºC durante 10 minutos.
  2. Mientras se enfría la base del pastel, pon a hervir el jarabe de frambuesa con el agua. Toma un poco de este compuesto para disolver el polvo para "pudding" y después intégralo al jarabe con agua, sin dejar de remover. Déjalo hervir a fuego lento. Por último, añade las frambuesas congeladas al "pudding" de frambuesas. Reparte esta mezcla de manera uniforme sobre la base del pastel y pon a enfriar todo un buen rato. 
  3. Cuando el pastel se haya enfriado, coloca una capa de crema batida sobre el relleno de frambuesas. 
  4. Después cubre la crema batida con galletas de mantequilla.
  5. Para que el pastel se vea aun más bonito, coloca sobre cada galleta un poco de crema, con una manga pastelera, y una frambuesa fresca.
  6. Como toque final, puedes espolvorear un poco de azúcar en polvo a tu obra maestra. Para servirla, córtala guiándote por la forma de las galletas.

¡Ya puedes mimar tu paladar con esta exquisitez! Es tan fácil preparar un pastel de frutas que se sale de lo convencional y que, por lo mismo, ¡sabe más rico!

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