4 clásicos caseros de la pasta

La pasta siempre apetece: en invierno, verano, al mediodía, por la noche, con frío o con calor. Hoy os enseñamos a hacer pasta casera y la salsa que mejor va con cada uno de los clásicos de la pasta.  

Ingredientes:

Para la masa:

  • 400 g de harina de sémola de trigo
  • 4 yemas de huevo
  • 1 huevo
  • 4 cucharadas de aceite de oliva
  • 4 cucharaditas de agua

Además:

  • Aproximadamente 20 palillos de dientes
  • Cinta adhesiva
  • Marco de fotos
  • Medias finas
  • Perchas para la ropa

Para el relleno de ricota (requesón):

  • 200 g de ricota (requesón)
  • 2 yemas de huevo
  • 30 g de queso parmesano rallado
  • 20 g de pan molido
  • Sal y pimienta
  • Romero
  • Albahaca
  • Perejil

Para la salsa de tomate:

  • 1 chalota (cebolla pequeña morada)
  • 1 diente de ajo
  • 80 g de tomates
  • 100 ml de tomate triturado
  • 1 cucharada de albahaca
  • Sal y pimienta

Para la salsa de crema (nata):

  • 10 g de mantequilla
  • 100 ml de crema (nata)
  • Ralladura de un limón
  • Queso parmesano rallado
  • Pimienta y perejil

Para el pesto:

  • 10 g de mantequilla
  • Pesto verde de bote
  • Piñones y queso parmesano 

Para los ravioli:

  • 25 g de tomates cherry
  • Queso parmesano
  • 1 manojo de rúcola

Instrucciones:

1. En primer lugar, has de hacer la misma masa para todos los tipos de pasta. Para ello, necesitas harina de sémola de trigo, que pondrás en un montón sobre una superficie de trabajo lisa. Forma un hueco en el centro del montón con los dedos, echa las 4 yemas y el huevo dentro, y mezcla todo bien con un tenedor. Añade un poco de aceite de oliva y agua. Ahora mezcla todo con la harina y amasa hasta obtener una masa uniforme. Envuélvela en plástico transparente y métela en la nevera durante una hora. Luego corta la masa en 4 partes, las que servirán para cada tipo de pasta. 

2. Para los castellane necesitas el primer cuarto de la masa. Aplánala con un rodillo de madera y córtala con un cuchillo primero a lo largo y luego transversalmente en tiras. Ahora necesitas cinta adhesiva y palillos de dientes. Pega unos 20 palillos en la cinta adhesiva y esparce harina por encima. Presiona una pequeña porción de masa sobre la cama de palillos y ruédala de un lado a otro. Así, quedará una superficie estriada. 

3. Ahora es cuando necesitarás la media. Mete un marco de fotos dentro. Pon los castellane sobre el centro de la media para que se sequen bien. 

4. Para la segunda variante, los farfalle, necesitas solo un rodillo de madera, un cuchillo y un tenedor. Estira el segundo cuarto de masa, corta dos rectángulos iguales de esta y deja la huella de un tenedor en ambos lados. Haz la forma típica de los farfalle con dos dedos. Deja esta pasta también secar sobre la media.   

5. Como para la primera vertiente de la pasta, estira la tercera parte de la masa con un rodillo para hacer los tagliatelle (si no tienes rodillo, puedes usar una botella de vino vacía). Ahora enrolla la masa de forma que te quedes con un rollo fino. Corta trozos de igual tamaño y vuelve a estirarlos. Cuelga las tiras de masa de una percha para ropa. Déjalas al menos 24 horas secando. 

6. Para la variante 4,  los ravioli, tienes que volver a partir por la mitad el cuarto trozo de masa que hiciste al principio. Vuelve a estirar la masa sobre la superficie de trabajo. Mezcla todos los ingredientes para el relleno de ricota y espárcelo sobre la masa con una cuchara. Moja los huecos de la masa con yema de huevo y coloca la otra mitad de la masa encima. Con un cuchillo, corta cuadrados del mismo tamaño y vuelve a juntar los cuatro lados con un tenedor.  

7. Ahora que ya sabes hacer los cuatro grandes clásicos de la pasta, te vamos a mostrar las salsas que mejor van con ellos. Los castellane van genial con salsa de tomate. Fríe una chalota y un diente de ajo muy bien picados en una sartén. Luego añade tomates pequeños triturados y condimenta con sal, pimienta y albahaca. Ponlo todo en un plato y esparce queso parmesano por encima. 

8. Para los farfalle con salsa de crema, solo necesitas mantequilla, crema, un limón, queso parmesano y perejil. Mezcla todo bien en una sartén y ya están listas las maripositas de pasta.  

9. El pesto es algo que siempre tenemos en casa, ¿verdad? Calienta un poco de mantequilla en una sartén, añade los tagliatelle y el pesto, y mueve bien la sartén. Con un par de piñones tostados y queso parmesano rallado le das un toque final al plato.  

10. Los ravioli rellenos de ricota van estupendos con tomates cherry, rúcula y queso parmesano.  

¿Para qué comprar pasta hecha si es tan sencillo hacerla nosotros? No solo sabe mejor; también al cocinarla, nos sentiremos como una auténtica nonna en la cocina. 

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