Una albóndiga de espagueti diseñada para una comida especial

La mayoría de las veces, unas albóndigas con espagueti son suficientes para saciar nuestro apetito; sin embargo, cuando estás realmente hambriento, necesitas algo más para sentirte satisfecho. Esta vez vamos a hacer algunos cambios, de manera que la albóndiga va aumentar de tamaño y el espagueti se va a convertir en relleno. 

Para la albóndiga:

• 1 kg de carne molida
• 2 huevos
• 100 g de pan rallado
• 2 cucharadas de perejil picado
• 150 g de chorizo
• 1 cucharada de pimentón
• 1 cucharada de mostaza
• 1 cucharada de kétchup
• 2 cucharaditas de sal
• 1 cucharadita de pimienta

Para el relleno:

• 100 g de mozzarella
• 150 g de espagueti cocido
• 150 ml de salsa de tomate

Además:

• 75 g de queso parmesano
• Algunas hojas de albahaca

Manos a la obra:

1. Mezcla la carne molida con los demás ingredientes para la albóndiga. Toma dos tercios de la carne y ponlos en un bol previamente cubierto con envoltura de plástico. Presiona la carne contra la base y las paredes para que queden cubiertas.
2. Pon la mozzarella dentro y después el espagueti. Vierte algo de salsa de tomate encima. 
3. Con las manos, haz una bola con el resto de la carne y aplánala hasta conseguir un círculo grueso. Coloca esta pieza sobre el bol y presiona el borde para unir la albóndiga.
4. Pon el bol boca abajo sobre una bandeja previamente cubierta con papel para hornear. Retira el bol y la envoltura de plástico, y mete la albóndiga al horno por 30 minutos a 170 ºC. En cuanto esté lista, vierte el resto de salsa de tomate sobre la albóndiga y rocíale el queso parmesano y la albahaca picada.

Cualquiera que se embarque en la aventura de hacer esta albóndiga necesitará todo un equipo de fútbol para comérsela o tener muchísima hambre. Esta extravagancia de carne no solo dejará todos los paladares contentos y satisfechos, sino que dará mucho de qué hablar desde que la pongas en la mesa.