Cómo hacer pasta casera: desde farfalle hasta tortellini | Masa de pasta fresca

Hacer pasta casera puede sonar muy complicado, ¡pero no lo es! Algunos tipos de pasta como los tortellini o farfalle no son solo los favoritos de muchos: además, se pueden hacer muy fácilmente con solo 3 ingredientes. ¡Y sin máquinas o prensas especiales!

En nuestro nuevo formato "Hecho en casa" aprenderás a hacer estos delicatessen en tu propia casa. Muy pronto verás que no solo es muy divertido: esta pasta sabe mucho más rica que la comprada en el súper. ¡Y no tienes que ser un cocinero experto para lograrlo!

Empecemos, pues. Vamos a darte la receta de la masa de pasta perfecta y te mostraremos cómo hacer tus tipos de pasta favoritos. ¡En sus puestos!

Masa de la pasta

Nuestra receta de masa de pasta está pensada para poder extenderse fácilmente con la mano. El resultado es algo más suave, más rico de lo habitual y sus ingredientes se pueden conseguir fácilmente. 

Ingredientes para la masa de la pasta:

  • 400 g de harina (tipo 405)
  • 1 huevo
  • 5 yemas de huevo
  • 100 ml de agua

Forma una montañita con la harina y hazle un hueco grande en el centro. Rellena este con los huevos y el agua, y mézclalos con un tenedor. Ve mezclando los huevos con la harina poco a poco. 

Cuando tengas la sensación de que has mezclado bien los huevos, el agua y la harina, y se haya formado una masa consistente, puedes empezar a amasarla con las manos. Amasa de 7 a 8 minutos para que el gluten se desarrolle bien. La masa que obtienes es flexible y suave y servirá de base para toda la pasta. 

Tip: si la masa aún está algo pegajosa, añádele un poco de harina. Si la masa está demasiado seca, puedes batir un huevo con un poco de agua templada. El líquido que obtengas distribúyelo uniformemente sobre la masa. 

Es muy fácil saber si la masa de pasta está lista: solo tienes que presionar la bola ligeramente con la mano. Si la bola recupera rápidamente su forma original, significa que puedes seguir con el siguiente paso. Envuelve la masa en film de plástico transparente y refrigérala de 30 a 60 minutos. 

Divide la masa en trozos para poder trabajarla mejor. Envuelve los trozos que no vayas a necesitar en film de plástico transparente para que no se sequen. 

Ahora solo tienes que decidir cuál de los 7 diferentes tipos de pasta quieres preparar: garganelli, farfalle, castellane, orichiette, tagliatelle, pappardelle o tortellini.

Garganelli

Los garganelli son un tipo de pasta que puedes hacer fácilmente con cosas que tienes ya en la cocina. 

Necesitas:

  • 2 cordeles
  • Tabla de madera
  • Palillos de madera

Coloca los dos cordeles a lo largo de tu superficie de trabajo y encima, la tabla de madera. Cubre esta con los palillos y anuda por encima los cordeles. ¡Tadá! Ya está lista tu tabla para hacer garganelli. 

Para darle la forma a la pasta, extiende la masa bien y córtala en 4 cuadrados de 4 cm. Enharina tu tabla para hacer garganelli, ponle un trozo de masa encima y ayudándote con un palillo, ve enrollando la masa para que vaya adoptando la forma de los surcos. Enrolla hacia el lado contrario, y ya están listos tus garganelli.  

Farfalle

Los farfalle son muy fáciles de hacer y muy lindos. Para prepararlos, extiende la masa muy fina y córtala en pequeños rectángulos con un cuchillo muy afilado o un cortador para pizzas. Luego aprieta los bordes con un tenedor.

La forma de los lacitos la consigues apretando el centro de los rectángulos con tu índice y pulgar. 

Tip: para que los farfalle se sequen bien, puedes colocar unas medias sobre un marco de fotos sin parte trasera y poner sobre ellas los farfalle. ¡Así de fácil es secar tus farfalle!

Castellane

Necesitas:

  • Cinta adhesiva
  • Palillos

Forma una hebra de 2 cm de grosor de la masa y córtala en trozos pequeños. 

Forma una cama de palillos y pégalos con cinta adhesiva en uno de los extremos. 

Enrolla los trozos de pasta lentamente sobre la cama de palillos para darles su forma estriada. ¡Ya están listos tus castellane!

Orichiette

Un clásico de la pasta italiana son los llamados orichiette. Para hacerlos, forma con la pasta una hebra de máximo 2 cm de grosor. Con un cuchillo para mantequilla, córtale un trozo de un grosor de entre medio y 1 cm. Coloca el cuchillo para mantequilla sobre el trozo de pasta, aplánala y tira hacia ti lentamente. 

La tensión enrosca la masa y le da la forma de orejita típica de los orichiette. Inténtalo un par de veces y no te rindas si los primeros no te salen tan bien como esperabas. 

Tagliatelle

Para los tagliatelle, primero extiende la masa en una única porción larga. Para que la masa te salga bien uniforme y fina, tenemos un truco: dobla 1/3 de la masa sobre el tercio inferior y sigue amasando con el rodillo hacia un lado y el otro. Así obtendrás un resultado mucho más uniforme. Tu masa quedará tan fina que podrás verte la mano a través de ella. 

Para darle la forma final a los tagliatelle, esparce un poco de harina sobre la masa y enróllala con cuidado. La harina hace que las capas individuales no se peguen las unas a las otras. 

Corta tiras del rollo de masa …

… y vuelve a desenrollarlas. ¡Ya están listos tus tagliatelle!

Por cierto, si cortas el rollo de masa en tiras un poco más gruesas, obtendrás pappardelle.

Tip: para secarlos, cuelga los tagliatelle y pappardelle de una percha. 

Tortellini

Para los tortellini, corta 4 cuadrados de 4 cm cada uno de la masa. Agrega un poco de relleno a cada cuadrado (nosotros hemos preparado uno sencillo de espinaca, cebolla y ajo, pero puedes dejar volar tu imaginación).

Dobla una esquina sobre la opuesta y apriétalo con cuidado para que salga el aire. Si los bordes no se pegan bien, puedes echarles un poco de agua. 

Une las otras dos esquinas formando una coronita: ¡ya están listos tus tortellini!

Cómo cocinar la pasta

Ten cuidado de que tu pasta no se pegue al echarla al agua hirviendo. Por 100 gramos de pasta necesitas una pizca generosa de sal y 1 l de agua. Muchas personas añaden un poco de aceite al agua caliente, ¡pero es totalmente innecesario! El aceite nadará hacia arriba y la pasta caerá hacia abajo. Por tanto, no se combinarán en absoluto y esto no servirá para nada. 

Tip: el agua de la pasta no sobresaldrá si colocas una cuchara de madera sobre la olla. Esta evita que se forme bien la espuma y el agua se quedará donde debe: en la olla. 

Vuelca la pasta sobre el colador en cuanto esté al dente. No enjuagues la pasta; basta con sacudirla un par de veces en el colador. Solo queda agregarle tu salsa favorita y ya está lista tu pasta. Buon appetito!

¿Pasta casera? ¡Desde ahora es facilísima de hacer! Esperemos que disfrutes de tu tipo de pasta favorita. ¿Para qué comprarla cuando puedes hacerla tú? 

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