Sfogliatella: una pasta italiana que le hace la competencia al croissant

Seguro que has probado un croissant francés en algún momento de tu vida, pero ¿alguna vez has tenido un croissant italiano? La sfogliatella, que significa "capa pequeña y delgada" en italiano, es similar a su hermana francesa, ¡te encantará el sabor intenso y fresco de esta delicadeza!

Necesitrás:

Para la masa:

• 500 g de harina
• 200 ml de agua tibia
• 1 cucharadita de sal
• 20 g de sal
• Harina para tu superficie de trabajo

Para el relleno:

• 400 ml de agua
• 1 pizca de sal
• 100 g de sémola fina
• 140 gr de ricota (requesón)
• 1 huevo
• 100 g de azúcar
• 1 cucharada de mermelada roja
• 1 cucharada de chocolate troceado

Para la decoración:

• Azúcar en polvo

Así se hace:

1. Vierte la harina en forma de círculo en la superficie donde vayas a cocinar. Haz una hendidura en el medio, vierte el agua y luego agrega la sal y la miel. Prepara una masa suave de los ingredientes y forma una bola. Envuelve la bola de masa en una envoltura de plástico y métela en la nevera durante 3 horas.

2. Extiende la masa en un pequeño óvalo. Enróllala luego en un rollo de cartón y colócala nuevamente en el refrigerador.

3. Con cuidado, desenrolla la masa del cartón, estírala un poco con las manos y cúbrela uniformemente con mantequilla. Luego enróllala nuevamente en el cartón para que la mantequilla se distribuya bien. Repite el proceso de desenrollar, untar y rebobinar dos veces más, cada vez más ancho. Finalmente, corta los bordes laterales y refrigera la masa enrollada durante 24 horas.

4. Para el relleno, hierve agua con un poco de sal. Agrega la sémola, revuelve durante 5 minutos con una batidora y luego deja que la sémola cocida se enfríe completamente. Coloca la sémola fría en un tazón y agrega el queso ricota o requesón, el huevo, el azúcar y el extracto de vainilla.

Divide la mezcla de sémola y ricota en dos porciones: mezcla una con mermelada roja y la otra con chocolate.

5. Corta rebanadas de alrededor de masa enfriada. Aplana cada rebanada y dale forma de tazón pequeño y añade el relleno. Ahora dobla un lado sobre el otro y cierra la masa en forma de concha.

6. Coloca el sfogliatelle en una bandeja forrada con papel para hornear y mételo al horno precalentado durante 30 minutos a 180°C. Antes de servir, espolvorea la masa con un poco de azúcar en polvo.

Tendrás que ser un poco paciente para hacer estos pasteles tú mismo, ¡pero el resultado final vale la pena!

Aquí puedes encontrar la receta de los cruffins del video adicional.