¡700 g de cebollas para poner a un estadio de pie!
La tarta de cebolla es un plato muy valorado en muchos países, especialmente los que están más al norte. Se trata de una receta a base de cebolla frita y trocitos de tocino. Si estás buscando algo sencillo, rico y abundante, entonces esta tarta es perfecta, ya que cumple los tres requisitos.
Vas a necesitar:
- 700 g de cebolla finamente picada
- 2 huevos
- 150 ml de crema (nata)
- Sal
Para la masa:
- 250 g de harina
- 50 g de mantequilla
- 1 cucharadita de sal
- 150 ml de leche
- 1 sobrecito de levadura seca
- 1 cucharada de azúcar
Además:
- 75 g de tocino
- Mantequilla en cubitos
Es muy fácil:
- Fríe la cebolla con mantequilla hasta que se ponga transparente. En un bol aparte mezcla los huevos, la crema y una buena cantidad de sal. Añade la cebolla frita.
- Pon en un bol harina, mantequilla y una cucharadita de sal. Aparte, revuelve la leche con la levadura seca y una cucharadita de azúcar, y agrégala a la mezcla anterior hasta conseguir una masa, que debes cubrir con un paño y dejar reposar.
- Extiende la masa de forma circular y colócala dentro de un molde para tartas. Cubre muy bien toda la superficie del molde con la masa y déjala reposar unos minutos. Después vierte la preparación con la cebolla y distribuye el tocino en trocitos y los cubitos de mantequilla por encima.
- Hornea la tarta a 175 ºC durante 60 minutos con la circulación de aire activada.
Te recomendamos comer la tarta de cebolla caliente y, si puedes, acompañarla con un buen vino de tu región. Pero incluso sin alcohol, ¡tu tarta de cebolla se derretirá gustosamente en tu paladar!