¡Un megapastel con zanahorias y bolas de chocolate ocultas!

Brasil es famoso por sus carnavales, la selva del Amazonas y sus jugadores de fútbol. Pero los postres brasileños no son menos impresionantes: por ejemplo, este pastel de zanahorias relleno de chocolate negro. 

Vas a necesitar:

Para la masa:

  • 5 zanahorias
  • 330 ml de aceite vegetal
  • 5 huevos
  • 360 g de harina
  • 300 g de azúcar
  • 1 cucharadita de polvo de hornear

Para los chocolates:

  • 30 g de mantequilla
  • 40 g de cacao en polvo
  • 400 ml de leche condensada

Para la cobertura:

  • 160 ml de leche
  • 100 g de cacao en polvo
  • 100 g de mantequilla
  • 400 g de azúcar
  • Virutas de chocolate para decorar

Se hace así:

1. Pela las zanahorias y licúalas junto con el aceite vegetal y los huevos hasta formar un puré muy suave. 

2. Vierte la mezcla en un recipiente y revuélvela con harina, el azúcar y el polvo de hornear. Después pon la mezcla en un molde para hornear en forma de anillo. 

3. Para hacer los chocolates, derrite los ingredientes en una sartén y revuelve constantemente. Tan pronto como la mezcla quede homogénea, ponla a enfriar en el refrigerador. 

4. Moldea bolitas de chocolate con la mezcla que pusiste a enfriar, después cúbrelas de harina y sumérgelas en el molde con el puré de zanahorias. Hornea el pastel a 170 ºC durante una hora con el calor de arriba y abajo activado. Luego dale la vuelta al pastel sobre una bandeja y déjalo enfriar. 

5. Para la cobertura, derrite la mantequilla en una sartén y añade la leche, el cacao en polvo, la mantequilla y el azúcar. A diferencia de otros pasteles, esta cobertura no solo debe cubrir la superficie del pastel, también se rellena el hueco del anillo con esta hasta que se desborda. Para terminar, decora tu pieza maestra con virutas de chocolate.

Tan pronto como este sueño brasileño de chocolate se enfríe, puedes inaugurar tu propio carnaval de los sentidos: las bolas de chocolate invocarán un delicioso sabor en tu boca mientras que el chocolate líquido fluirá desde el centro en cuanto cortes la primera rebanada y hechizará tu mirada. ¡Toda una fiesta para los ojos y papilas gustativas!

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