¡Este cheesecake tiene un colorido brillo sin hornear!

Esta receta de tarta de queso es un claro ejemplo de la repostería "moderna": la base no está hecha de la típica masa aburrida, el ingrediente principal para el relleno es el queso crema y no el requesón, la tarta no requiere cocción y, por último pero no por ello menos importante, ¡el resultado es una fiesta de color! Déjate encantar por este cremoso pastel: toda una oda a la felicidad. 

Vas a necesitar:

Para la base:

  • 300 g de galletas de avena
  • 40 g de cacao en polvo
  • 200 g de mantequilla líquida

Para la crema:

  • 800 g de queso crema
  • 100 g de azúcar en polvo
  • 1 cucharada de extracto de vainilla
  • 400 ml de crema espesa (nata montada)

Para el glaseado:

  • 200 ml de leche condensada dulce
  • 150 ml de agua
  • 175 g de azúcar
  • 4 hojas de gelatina ablandadas
  • 350 g de chocolate blanco picado
  • Colorante alimentario rojo, amarillo, verde y azul

Se hace así:

1. Tritura las galletas de avena en una sartén en un molde redondo para hornear y mézclalas muy bien con la mantequilla. Presiona todo con una cuchara y deja enfriar el molde durante 2 horas.

2. Para la crema, mezcla el queso crema con el azúcar en polvo y el extracto de vainilla con un batidor manual. A continuación, incorpora la crema espesa y vuelve a mezclar hasta obtener una textura homogénea.

3. Vierte la crema en el molde y alisa la superficie con una cuchara. Mételo en el refrigerador por otras dos horas.

4. Mientras tanto, prepara el glaseado: calienta la leche condensada con el agua y el azúcar mientras revuelves constantemente. Cuando el líquido esté caliente (¡pero no debe hervir!), añade la gelatina y el chocolate, y haz un puré con una batidora. 

5. Cuela y vacía el glaseado en una jarra y déjalo enfriar hasta que alcance unos 30 ºC. Después agrega un par de gotas de colorante alimentario en diferentes lugares del glaseado. 

6. Saca el pastel del molde y colócalo sobre una rejilla o una bandeja para bañarlo con el glaseado de manera uniforme, aunque el color quedará repartido de manera desigual.

Si esta colorida pieza te ha gustado, tenemos muchas más recetas que podrían inspirarte. ¡Prueba nuestras deliciosas tartitas de yogur, el alucinante cheesecake galáctico inspirado en Van Gogh, la cheesecake arco iris, muy adecuada para un cumpleaños de niños, o el jugoso cheesecake de stracciatella. Por cierto, ¡todos estas tartas no necesitan horno, se ven muy bien y son muy fáciles de hacer!

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