Un pastel de naranja y pomelo que no solo es un espectáculo visual

¿Te apetece una dulce tentación afrutada? En esta receta, el sabor dulce de la naranja y el aroma amargo del pomelo (toronja) crean una combinación realmente deliciosa, que además tiene una pinta estupenda. ¡Te la vas a querer comer con los ojos!

Porciones: 4-6
Tiempo de preparación: 60 min
Tiempo de horneado: 25 min
Tiempo total: 85 min
Tiempo de enfriamiento: 11 h
Grado de dificultad: alto

Ingredientes:

Para la naranja y el pomelo confitados:

• 1 naranja
• 1 pomelo rosa
• 160 g de agua
• 110 g de azúcar
• Colorante alimentario (opcional)

Para la masa:

• 6 claras de huevo
• 240 g de azúcar
• 120 ml de leche
• 110 ml de aceite vegetal
• 200 g de harina
• 1 cucharadita de extracto de vainilla

Para la crema:

• 2 yemas de huevo
• 50 g de azúcar
• 90 ml de leche
• 170 ml de jugo de naranja
• 10 g de maicena
• 15 g de mantequilla sin sal
• 290 g de queso crema tibio
• 5 g de gelatina en polvo
• 25 ml de agua

Para la gelatina de pomelo:

• 1 pomelo cortado en dados
• 50 ml de jugo de pomelo
• 15 g de azúcar
• 4 g de gelatina en polvo
• 15 ml de agua

Además:

• Glaseado rosa de espejo
• 100 g de crema (nata) batida blanca y 100 g de crema (nata) batida naranja
• Colorante alimentario naranja
• Bandeja de hornear. Medidas: 34 x 25 cm
• Tapete de silicona para hornear
• Molde redondo. Diámetro: 13 cm (para la mermelada)
• Molde redondo. Diámetro: 18 cm

Preparación:

1. Corta la naranja y el pomelo en rodajas de 3 mm de grosor. Pon a hervir el agua con el azúcar en una olla y luego divídela en dos ollas. Coloca las rodajas de naranja en una olla y las rodajas de pomelo en la otra. Deja que se infusionen durante unas 3 horas. Colorea el líquido con colorante alimentario al gusto.

2. Parte las rodajas de pomelo confitadas por la mitad y colócalas, junto con las rodajas de naranja completas, en tres filas separadas en los dos tercios superiores de la bandeja de horno forrada con un tapete de silicona. El patrón debe quedar uniforme.

3. A continuación, prepara la masa. Bate el azúcar con las claras de huevo e integra a esta mezcla el resto de los ingredientes para obtener una textura cremosa. Vierte la mezcla en una manga pastelera y colócala entre y sobre las rodajas de fruta en la bandeja de horno. Hornea durante 25 minutos a 170 °C con el calor superior e inferior activado y luego deja que se enfríe todo.

4. Vuelca la masa del pastel sobre una tabla de cocina y retira el tapete de silicona para hornear.

5. Corta la zona de la masa con fruta horneada en dos tiras longitudinales de unos 6-7 cm de ancho cada una. Corta dos semicírculos de 6 cm de radio cada uno en el tercio inferior de la masa, donde no hay fruta. Ten en cuenta que los semicírculos unidos deben caber en el fondo del molde.

6. A continuación, engrasa ligeramente el molde desmontable y forra la pared interior del molde con las tiras de masa, con la fruta hacia fuera. Introduce los dos semicírculos recortados como base y júntalos para formar un círculo.

7. Prepara la crema de naranja para el relleno de la tarta. Mezcla las dos yemas de huevo y 30 g de azúcar en una olla y añade la leche, 110 ml de jugo de naranja y la maicena. Lleva todo a ebullición lentamente. En cuanto la mezcla espese, agrega la mantequilla sin dejar de revolver. Cuando todo se haya enfriado un poco, mezcla el queso crema con el resto del azúcar y el jugo de naranja. Mientras tanto, ablanda la gelatina en agua y luego caliéntala en el microondas para que se vuelva líquida. Por último, añade la gelatina líquida a la crema de naranja, introduce la crema terminada en una manga pastelera y reparte la mitad en el molde desmontable.

8. Para hacer la gelatina de pomelo, ablanda la gelatina en agua y luego caliéntala en el microondas. Mézclala con el jugo de pomelo y el azúcar y caliéntala lentamente. Por último, agrega los trozos de pomelo y vierte la gelatina aún líquida en un pequeño molde desmontable. A continuación, pon a enfriar la mezcla durante al menos tres horas.

9. Cuando la gelatina se haya enfriado, sácala con cuidado del molde y coloca la pieza entera sobre la crema de naranja de manera que la cubras.

10. Rellena el pastel con la crema restante y déjalo enfriar otras 4 horas.

11. Cuando el pastel se haya enfriado lo suficiente, vierte por encima una fina capa del glaseado de espejo terminado y pon a enfriar de nuevo el pastel, por poco tiempo. 

12. Por último, alterna gotas grandes de crema blanca y naranja como decoración. El jugoso pastel de naranja y pomelo está listo.

Este pastel afrutado te hará muy feliz, tanto por su sabor como por su diseño. ¡Pruébalo ahora mismo!