Esta receta no es como las demás: es una montaña de pastel con una deliciosa capa de chocolate

¿Qué es hermoso de lejos pero te hace sudar frío conforme te vas acercando? ¿El fuego? ¿Una araña gigante y venenosa? ¿O tal vez una entrevista de trabajo? No. ¡Nada de eso! La respuesta es una montaña. Porque, vamos a ser honestos, todos creen que son maravillosas, pero subirte a la cima solo es para los entusiastas con mejor condición física. Así que para dar a todos la misma oportunidad de conquistar un pico, hemos añadido esta montaña de pastel a nuestro paisaje culinario. No necesitas tener experiencia en alpinismo, solo muchas ganas de pasártelo bien. 

Vas a necesitar:

  • 4 huevos
  • 400 g de azúcar
  • 400 g de crema agria
  • 360 g de harina
  • 15 g de polvo de hornear
  • 4 cucharadas de cacao
  • Salsa de chocolate
  • Nueces picadas

Se hace así:

1. Primero bate 4 huevos y 400 gramos de azúcar hasta obtener una textura espumosa. La mezcla estará suficientemente aireada cuando haya casi duplicado su tamaño y adquirido un color beige. 

2. Mezcla la harina y el polvo de hornear. Agrega 400 g de crema agria y vuelve a batir los ingredientes. Separa la mezcla en dos porciones iguales  e integra el cacao en una de ellas para preparar la tarta de chocolate. 

3. Vierte cada porción de masa en su respectivo molde redondo para hornear. Hornéalas durante 30 minutos a 175 ºC con la circulación de aire activada.

4.  Mientras tanto, bate el resto del azúcar y de la crema agria. 

5. Después de hornear los pasteles, déjalos enfriar. A continuación, sácalos de sus respectivos moldes y rómpelos en trozos gruesos.

6. Sumerge parcialmente las piezas de tarta en la crema y colócalas sin un orden específico sobre el plato. Solo asegúrate de que la parte de abajo sea más grande para que sostenga a las capas superiores, las cuales deben hacerse cada vez más pequeñas para tomar la forma de una montaña. 

7. Después toma un cuchillo grande y entiérralo varias veces por todo el pastel. Quizás te parece un paso absurdo, pero el objetivo es crear un sistema de túneles. Después rocía la salsa de chocolate sobre el pastel, dejando que fluya dentro de las incisiones de la montaña. Para terminar, esparce la mayor cantidad de nueces picadas que puedas. 

Esta original montaña de pastel no solo ofrece una gran diversión a los creativos pasteleros con un impulso destructivo reprimido, sino que también es muy divertido para los niños. Además de ser muy entretenido despedazar tartas salvajemente, no se requiere ninguna coordinación especial, como en otras recetas pasteleras. 

Y si descubres que te gusta hacer migas y saborear los resultados, entonces prueba nuestro pastel de topo con fresas.

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