‘Repollo adictivo’ es la traducción del nombre del repollo yamitsuki, y no se trata de una exageración. Prueba un bocado de esta ensalada de repollo japonesa y te costará parar de comerla. Aquí descubrirás su secreto y cómo prepararla. ¡Tienes que probar esta receta!
Una ensalada que enamora: repollo yamitsuki
Mucha gente tiene una relación de amor-odio con el repollo. Mientras que a algunos les encanta, otros lo asocian con el olor de la escalera de la casa de la abuela. Pero incluso estas pobres personas traumatizadas deberían darle una segunda oportunidad a esta verdura. Resulta que, si no se cocina el repollo con mantequilla hasta la muerte, sabe realmente bien. Esto lo saben bien en Japón, donde preparan el repollo yamitsuki.
El repollo yamitsuki también se conoce con el nombre algo cuestionable de ‘repollo adictivo’. Al principio suena extraño, pero yamitsuki no significa otra cosa que ‘adictivo’. En Japón es un plato popular en las llamadas izakayas, las tranquilas tabernas donde también se sirve comida. Si pruebas la ensalada de repollo japonesa entenderás desde el primer bocado el porqué de su peculiar nombre.
Además, su preparación solo dura unos cinco minutos y no necesitas muchos ingredientes. Aparte del repollo, solo necesitas ajo, sésamo, aceite de sésamo y algo que potencie el sabor umami. Para ello, un simple caldo de verduras es ideal. El repollo yamitsuki también está absolutamente delicioso con shio koji, una pasta para sazonar hecha de arroz fermentado con moho noble y sal. Puedes conseguirla, por ejemplo, en Internet o en supermercados asiáticos. Mezcla todo bien y sirve el repollo de inmediato. Acompaña con arroz, sopa de miso o pescado frito.

Repollo yamitsuki
Ingredientes
- 350 g de repollo
- 1 cucharada de ajonjolí blanco
- 2 dientes de ajo
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de caldo de verduras en polvo o shio koji como alternativa
- 2 cucharadas de aceite de sésamo tostado
- 1/2 cucharadita de hojuelas de chile opcional
Elaboración paso a paso
- Corta el repollo en trozos del tamaño de un bocado y lávalo bien. Luego, sécalo muy bien.
- Tuesta el ajonjolí en una sartén sin aceite hasta que desprenda su aroma y luego muélelo hasta hacerlo polvo.
- Pela y prensa los dientes de ajo.
- En un recipiente con tapa, mezcla el repollo con todos los ingredientes, cierra el recipiente y agítalo todo bien. Sírvelo de inmediato, preferiblemente con arroz.
Este artículo se publicó originalmente en leckerschmecker.me y se ha traducido con ayuda de la IA. Nuestro equipo editorial lo ha revisado cuidadosamente antes de su publicación.

