Lo fresco se une a lo frutal: ¡esta sopa de tomate y fresa es una joya culinaria que no puedes dejar de probar! Imagínate la armonía agridulce de las fresas y tomates combinados, junto con un leve toque de cebolla y ajo, y un añadido de hierbas aromáticas. ¡Una sopa de ensueño!
Deliciosamente fresca y sabrosa: cómo preparar una sopa de tomate y fresa
¿Tomates y fresas juntos en una sopa? ¡Sí, has oído bien! Estos dos ingredientes están hechos el uno para el otro, porque cada uno aporta sus propiedades únicas, que juntas crean un equilibrio sorprendente entre acidez y dulzor. El tomate aporta frescura, con su sabor umami, y un toque de acidez que armoniza a la perfección con el dulzor jugoso de las fresas. Las fresas realzan las notas azucaradas naturales de los tomates y le dan a la sopa un toque frutal sutil.
Si te han dado ganas de preparar nuestra sopa de tomate y fresa, vete corriendo al supermercado más cercano. Además de tomates y fresas, necesitas albahaca fresca, un limón, un poco de crema, cebollas y ajo. Seguro que ya tienes en casa vinagre balsámico, azúcar, sal y pimienta, así como caldo de verduras y hierbas secas.
Primero, sofríe las cebollas y el ajo en una olla con aceite de oliva hasta que estén translúcidas. Luego, agrega los tomates y las fresas cortados en trozos y sofríelos también antes de sazonar todo con hierbas, un poco de azúcar y vinagre balsámico. A continuación, agrega el caldo de verduras y deja que todo hierva a fuego lento durante unos 20 minutos. Después, licúa la sopa finamente, sazona con sal, pimienta y jugo de limón al gusto, y sírvela.
Recomendamos servir esta sopa junto con una baguette fresca y crujiente, con la que podrás mojar hasta la última gota. También viene bien acompañada de una ensalada de rúcula con queso feta. ¡Buen provecho!
INFORMACIÓN ADICIONAL:
Tiempo de preparación: 35 min
Tiempo total: 35 min
Porciones: 4
INGREDIENTES:
- 800 g de tomates
- 300 g de fresas
- 2 cebollas
- 2 dientes de ajo
- 1 limón
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 4 cucharadas de vinagre balsámico
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de albahaca
- 1 cucharada de orégano
- 200 ml de caldo de verduras
- Sal y pimienta al gusto
- 100 ml de nata (crema de leche)
- 1 puñado de albahaca fresca
PREPARACIÓN:
- Lava los tomates, retírales el pedúnculo y córtalos en trozos grandes. Lava las fresas, quítales las hojas y córtalas en trozos. Pela las cebollas y los ajos. Pica finamente las cebollas y el ajo. Exprime el jugo del limón.
- Calienta 2 cucharadas de aceite de oliva en una olla grande. Añade la cebolla y el ajo, y sofríelos hasta que estén translúcidos. Incorpora los tomates y las fresas, y deja que se cocinen a fuego medio durante unos 5 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Añade el vinagre balsámico, el resto del aceite de oliva, el azúcar, la albahaca y el orégano. Sofríe brevemente.
- Desglasa con el caldo de verduras y remueve bien. Deja que la sopa cueza a fuego medio durante unos 20 minutos, hasta que los ingredientes estén tiernos.
- Tritura la sopa hasta que tenga una textura suave. Salpimienta al gusto y añade un poco de jugo de limón para ajustar el sabor.
- Sirve la sopa de tomate y fresa en cuencos. Decora con un poco de crema de leche y albahaca fresca.
Este artículo se publicó originalmente en leckerschmecker.me y se ha traducido con ayuda de la IA. Nuestro equipo editorial lo ha revisado cuidadosamente antes de su publicación.