Para empezar, pon una cucharadita de aceite en una sartén a fuego medio.
Antes de freír el trozo de solomillo, condiméntalo con sal, pimienta y romero. Después fríelo unos dos minutos por cada lado en el aceite caliente. A continuación, deja que la carne se enfríe un poco.
Mientras tanto, cuece o fríe y condimenta las espinacas a tu gusto.
Extiende la masa de hojaldre sobre una bandeja cubierta con papel para hornear y coloca encima las lonchas de tocino, formando un cuadrado. Reparte las espinacas escurridas sobre el cuadrado de tocino y aplánalas con una cuchara. Luego, coloca la pieza de solomillo en el borde del cuadrado de espinacas.
Barniza con el huevo batido el borde del otro lado más largo de la masa para que el rollo se pegue muy bien. Empieza a enrollar el trozo de solomillo con la masa de hojaldre y, al final, dobla ambos extremos hacia adentro. Presiónalos un poco para que todo quede bien cerrado.
Barniza todo el exterior con huevo batido. Con un cuchillo afilado, haz unos cortes superficiales sobre la pieza, de forma perpendicular y después de forma vertical, creando un diseño de diamante. Mete toda la pieza al horno (precalentado) durante 30 minutos a 180 ºC.