Pasa por el colador la primera porción de azúcar y almendras. Bate la primera porción de clara de huevo con un poco de azúcar hasta alcanzar el punto de nieve, agrega un poco de colorante rojo poco antes de dejar de batir. Añade poco a poco la mezcla de azúcar y almendras en el huevo batido.
Repite el proceso tres veces más con el resto de los ingredientes. Tiñe cada porción con un color diferente.
Pon las porciones en mangas pasteleras sin boquilla. Después corta las puntas y colócalas todas juntas dentro de una manga pastelera más grande; esta sí debe tener una boquilla.
Con la manga pastelera grande aplica unas gotas para macarrones sobre una bandeja previamente recubierta con papel para hornear. Para que queden bien, es necesario mover la manga pastelera en forma circular. Después hornea los macarrones a 150 ºC durante 13 minutos, con el calor de arriba y abajo activado.
Mezcla colorante alimentario blanco con leche condensada. Sumerge un cepillo de dientes nuevo en esta combinación y pasa tu dedo con cierta presión sobre las cerdas para rociar pequeñas estrellas sobre los macarrones.
Hierve las moras y cuélalas. Integra la crema y el chocolate blanco derretido en el puré de moras, y después déjalo enfriar unos 30 minutos. Luego mezcla todo con la batidora eléctrica hasta conseguir una crema ligera.
Aplica un poco de crema sobre el macarrón y coloca una "tapa" encima. Presiona un poco para que la crema se distribuya hasta los bordes.