Corta el pan blanco en trozos gruesos, es mejor no utilizar uno fresco, sino el del día anterior. Luego añade las ciruelas, los albaricoques y los arándanos cortados en trozos pequeños. También los cinco huevos, el perejil, el tomillo, la sal y la pimienta deben añadirse a los ingredientes anteriores.
Derrite la mantequilla en una olla y sofríe las cebollas hasta que estén transparentes. Luego agrega la leche y vierte esta mezcla en el recipiente donde está el pan. Revuelve todo muy bien.
Abre el pavo, retira los huesos y las tripas, sazona con sal y pimienta y cubre con el relleno.
Abre también el pato, deshuésalo y quítale las vísceras. Colócalo sobre el pavo, sazónalo con sal y pimienta y agrégale el relleno encima.
Finalmente corta el pollo, deshuésalo y sácale las vísceras. Colócalo sobre el pato, sazónalo con sal y pimienta y cúbrelo con el relleno.
Cierra el corte del pavo con cuidado y cóselo firmemente con una aguja e hilo de cocina.
Por último, ata las patas con hilo de cocina y hornea el pavo durante cuatro horas a 180 °C con la circulación de aire (modo de convección) activada.
Cuando saques el pavo del horno, puedes servirlo con arándanos y col roja para darle un toque extra afrutado.