Calienta la Nutella, mézclala luego con polvo de cacao e introduce la mezcla en un bote de caramelos efervescentes vacío y limpio. Mete en el congelador y deja una noche entera.
Mezcla ambos tipos de azúcar, la sal y mantequilla. Añade la harina y amasa. Envuelve la masa en film de plástico transparente y refrigera durante una noche.
Córtale la base al bote de caramelos, saca la mezcla de Nutella y cacao congelada de su interior, y córtala en rodajas. Coloca una tapa grande de sartén boca arriba sobre un bol, engrasa la tapa y distribuye por su superficie las pintas de chocolate.
Extiende 2/3 de la masa quebrada e introdúcela con cuidado en la tapa de la sartén. Haz presión con los dedos y recorta la masa que sobresalga.
Rellena la masa quebrada con el pudding de vainilla.
Cubre el pudding de vainilla con salsa de chocolate.
Cubre la salsa de chocolate con el pudding de chocolate.
Extiende el resto de masa quebrada y cubre todo con ella.
Une con un tenedor los trozos de masa quebrada.
Coloca la tapa de sartén boca abajo sobre una sartén de hierro fundido grande. Hornea la galleta gigante durante 90 minutos a 180 °C con la circulación de aire activada hasta que esté dorada. Sácala con cuidado de la tapadera y déjala enfriar, lo mejor una noche entera.