Pastel de frutas con mango, fresas y crema de mantequilla

Cuando se acerca el verano, tienes más ganas de pasteles de fruta fresca que con crema. La siguiente receta, sin embargo, es una combinación de ambas. Esta tarta está coronada con una gran espiral de fresas, mango y crema de mantequilla. Lo que en principio parece un pastel convencional termina convertido en ese grandioso pastel de frutas perfecto para acompañar el café bajo el cielo de una cálida tarde de domingo en el campo, en el jardín, en la terraza o, como mínimo, frente a la ventana.

Vas a necesitar:

Para la masa:

  • 450 g de harina
  • 55 g de cacao en polvo
  • 350 g de mantequilla fría en cubitos
  • 1 cucharadita de sal
  • 350 g de azúcar
  • 1 huevo
  • 60 ml de agua fría

Para el relleno:

  • 40 g de azúcar
  • 5 cucharadas de maicena
  • 400 g de fresas
  • 400 g de mango

Para la crema de mantequilla:

  • 200 g de mantequilla
  • 170 g de azúcar en polvo
  • 100 g de cobertura de chocolate blanco

Para la salsa de fresa:

  • 300 g de fresas
  • 50 g de azúcar gelificante, 3:1
  • El jugo de medio limón

Para la salsa de mango:

  • 300 g de mango
  • 50 g de azúcar gelificante, 3:1
  • El jugo de medio limón

Se hace así:

1. Primero, prepara la masa. Pon la harina, el cacao en polvo, la mantequilla, la sal, el azúcar, el huevo y el agua fría en un recipiente, y amasa todo con las manos hasta obtener una textura suave. Envuelve la masa en film transparente y ponla en la nevera durante una hora.

2. Mientras tanto, puedes preparar el relleno. Pela un mango y córtelo en cubos pequeños. Añade azúcar y maicena, y mezcla todo bien.

3. Saca la masa de la nevera, córtala por la mitad y aplana las dos partes de forma circular. Pon una mitad extendida en un molde de pastel previamente engrasado y presiona la masa ligeramente.

4. Corta las fresas por la mitad y colócalas sobre la masa en el molde. Luego agrega la pasta de mango y extiéndela uniformemente.

5. Coloca la otra mitad de la masa sobre la fruta y presiona bien los bordes con los dedos. Corta el exceso de masa con tijeras o un cuchillo. Haz algunos agujeros en la masa con un pincho y métela en el horno a 180 °C durante 50 minutos con el calor superior e inferior activado. Cuando la tarta esté lista, deja que se enfríe.

6. Para la crema de mantequilla, derrite la cobertura de chocolate blanco en baño maría y deja que se enfríe un poco. Bate la mantequilla hasta que haga espuma y añade gradualmente azúcar en polvo. Luego agrega la cobertura de chocolate enfriada y mezcla todo bien. Vierte la crema en dos bolsas de plástico o mangas pasteleras y, con la ayuda de un plato giratorio, aplica una doble espiral en el pastel.

7. Prepara las dos salsas de frutas. Corta las fresas y el mango en trozos pequeños, y ponlos a calentar en una olla. Luego tritura la fruta, añade el azúcar gelificante y jugo de limón. Después vierte cada salsa en una botella pequeña. Rellena de forma alternada los espacios creados por la doble espiral con la salsa de fresa y mango.

Si prefieres los kiwis, también puedes usarlos en lugar del mango. Estoy seguro de que va muy bien con los otros componentes. Además de su sabor exquisito, esta tarta te atrapará por su composición visual. Es perfecta para disfrutarla en temperaturas veraniegas.

Aquí puedes encontrar la receta del pastel de frambuesas que aparece en el vídeo extra.

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